Reflexiones sobre el Congreso Internacional: “Kant y la condición humana”
Immanuel Kant El evento se realizó entre el 4-6 de abril y logró promover un profundo dialogo acerca de los distintos aspectos de la condición humana en Kant, de manera específica, se reflexionó en torno a tres ejes esenciales de su pensamiento: las utopías, el concepto de mal radical y el problema del autoengaño. El Congreso estuvo organizado […]

Immanuel Kant
El evento se realizó entre el 4-6 de abril y logró promover un profundo dialogo acerca de los distintos aspectos de la condición humana en Kant, de manera específica, se reflexionó en torno a tres ejes esenciales de su pensamiento: las utopías, el concepto de mal radical y el problema del autoengaño. El Congreso estuvo organizado por tres profesores especialistas en la filosofía práctica de Kant: Luis Placencia (U. de Chile), Felipe Schwember (U. Adolfo Ibañez) y Miguel González (U. Católica de Chile). La última sesión del evento tuvo lugar el 6 de abril en el Instituto de Filosofía UC (Campus San Joaquín) y contó con la presencia y participación del profesor Miguel González, “El mal radical como Factum de la condición humana” y del destacado profesor alemán Cristoph Horn (Rheinische Friedrich-Wilhelms-Universität Bonn). A continuación trascribimos algunos apartes de sus comunicaciones:
El mal radical como habito
“No parece ser claro en qué sentido preciso cree Kant que deberíamos imputarnos el mal como una propiedad característica. Si alguien toma una decisión fundamentalmente errada que hace degenerar su naturaleza en una segunda naturaleza peor, entonces se debe precisar el espacio de libertad de ahí en adelante como limitado, no como completamente libre e imputable. El afectado semeja a un adicto a las drogas que, por cierto de modo voluntario, está preso de una adicción insuperable, pero como adicto no es más libre (o lo es sólo de modo limitado)… Llamemos a esto el modelo “el modelo de adicción de la maldad humana”. Por cierto no quiero decir que la maldad sea vivida como algo tan apremiante y exigente como una adicción. El punto de comparación es su irresistibilidad y su inescapabilidad…El punto central aquí es que esa concepción trae problemas serios para la concepción kantiana de la libertad moral, porque la voluntad del ser humano no es más, después de una primera decisión errónea, un “pecado original moral”, completamente libre de decidirse por la moral”. (C. Horn: Kant, sobre la antropología del carácter malo”).
“El mal radical como Factum de la condición humana”
En la ponencia se abordó el concepto de mal radical, entendiendo que se trata de una versión racionalista del concepto teológico de “pecado original”. La tesis de Kant es que “el hombre es malo por naturaleza”. En su ponencia, el Prof. González sostuvo que Kant explica el problema del mal utilizando un modelo reconstructivo, es decir, que lo que pretende es establecer las condiciones de posibilidad de la maldad humana. De esto se sigue que es errado atribuirle los modelos que entienden el mal radical como si fuese una adicción o un mal hábito. En segundo lugar, critiqué la tesis de la “revolución en la disposición moral fundamental”. Kant supone que todo lo que la razón nos manda es posible, lo cual me parece injustificado y voluntarista.